Sui Generis no sólo fue Charly García y sus desenfrenadas y existencialistas ocurrencias, junto a él ¿como el Lado A o B de los casetes de los años setenta ¿siempre estuvo Nito, su indispensable compañero musical para componer letras que dicen "Hubo un tiempo en que fui hermoso y fui libre de verdad, guardaba todos mis sueños en castillos de cristal". Mestre, más tarde, siguió su camino con la banda Los desconocidos de siempre y más tarde en solitario con 20/10, Escondo mis ojos al sol, y Nito y Flores en Nashville.
Ultima canción que compuso.
My Dear. La escribí en mi casa de Buenos Aires. Queda en el segundo piso y es un lugar especial.
Último recuerdo de cuando empezó en la música.
Aún guardo la foto de mi primera presentación. A los seis años me llamaron del coro del colegio y aparezco con cara de miedo por ver a todos mis compañeros al frente.
Última vez en Colombia.
Octubre 2009. Vine a los premios Shock y compartí escenario con Andrés Cepeda. Cantamos a dúo Me sacaste de la casa.
Última guitarra que compró.
Gibson J45. Es una versión similar a la que usaban Los Beatles. Aún no la llevo en los viajes. Antes debo sacarla por mi país, tocarla mucho para que despierte y habituarme a ella.
Último toque con Charly García.
El 5 de diciembre de 2009 me invitó a un concierto en el hipódromo del Rosario. Se lo había prometido.
Última vez que lloró.
Hace poco que me descargué de algunas cosas. Hay que hacerlo, no como práctica, pero hace bien.
Último recuerdo memorable.
Tomarle la mano a mi mamá antes de morir.
Ultima canción favorita.
Hace poco falleció mi mamá y le compuse Flores en el mar.
Última vez con Sui Generis.
En un parque de Buenos Aires. Fue en 2000 y formé parte de una gira por Chile y Perú.
Último lugar de residencia.
Siempre estoy de acá para allá, pero me gusta mucho Miami, el teléfono no suena tanto y las cosas se solucionan por Internet. En Buenos Aires hay mucho estrés.
Último objeto que le lanzaron.
Notas cortas con saludos.
Último lugar favorito en el mundo.
Pronto iré a Israel, pero me encanta Pinamar al sur de Buenos Aires o Miami.
Último propósito en el que creyó.
Es espiritual. Dejar de tomar y cambiar mi vida hacia algo espiritual.
Último cambio más drástico en su vida.
Dejar de beber y con eso, empezar otra vida. Desde cero.
Fuente: Revista DonJuan