lunes, 8 de febrero de 2010

Análisis y mini crónica - "Deberías saber por qué" (2009)

Esta es una breve crónica sobre el último tema de Charly, presentado en agosto del año pasado. Deberías saber por qué, el análisis.

EL CONTEXTO:

La canción se compone aproximadamente en el primer semestre de 2008 y se comienza a tocar en vivo en lugares como San Juan y algunos otros shows pequeños alrededor del país. Cuentan muchos asistentes que ya desde ese entonces la letra es tal y como la conocemos hoy en día. No obstante, el tema como salió publicado en Agosto pasado es NUEVO en cuanto a su edición y producción.

De las primeras versiones que se conocieron fueron la del programa radial Que Se Vayan Todos, en donde Hoby de Fino pasó un audio de Charly tocandola en lo que aparentemente era la Quinta de su amigo Ramón ‘Palito’ Ortega. En esa versión de aire se oye un Charly tocando el piano de una forma bastante prolija y con una voz mucho más clara que de lo que se le conocía o asociaba hasta ese entonces.

Sin embargo, hay una grabación previa que fue la que se pudo oir en la exposición del artista Gustavo Maso titulada: El mundo que se olvidó del hombre en donde se oía a un Charly melancólico y quizá un poco sedado producto no de las drogas (como tanto malintencionado con ganas de figurar quiere recalcar) sino simplemente del tratamiento que estaba llevando a cabo, dando una versión del tema muy fiel a su estilo por ese entonces, sobresaturada de capas de sonido y con poca claridad vocal.

LA LETRA:

Charly se apropia, no es sorpresa, de la onomatopeya 100% argentina: el CHE. Y la usa repetidas veces para iniciar las frases en sus canciones de una manera enfática, contestataria, y a modo de reclamo. Les habla directamente a los suyos, a los argentinos, en una especie de charla-reclamación. Parece leerse entre lineas a un Charly diciendole al oyente, “Si en verdad me tomas en serio, tu, sí, TU, deberías saber por qué llegás hasta ahí no más, como todos”.

El “Todos” en Charly contiene un significado bastante fuerte y a la vez ambiguo. Porque no se sabe especificamente a qué TODOS se refiere. Si es a sus fans, a sus detractores, a sus antiguos managers, a su “entorno”, o si al final se refiere a todos ellos dentro del mismo frasco. Para Charly todos nos trasamos limites, y aparentemente Charly García, a Junio de 2008 había hecho cosas que quizá ni el mismo él había pronosticado, tanto a nivel música como a nivel vida y “escándalo”. Es una letra 100% García, autoreferencial, y dividida en diferentes partes dentro de la canción.

Si nos tomamos la libertad de hablar tanto de él, deberíamos saber el “por qué” de muchas cosas, cosas que en el fondo, no son misterio para nadie. Si nos ponemos la camiseta “García” deberiamos saber por qué no salimos de la misma rutina de antes, y vamos hasta ahí no más.

Andar, preguntar, discurrir, corromper, gritar, y discutir “hasta el día en que te volveré a ver” es un cuestionamiento que él le hace a los que “entraron hasta su apartamento” y aún así como que ‘no se lo tomaron en serio’ sino que en palabras de Charly “no hacen sino gilarme”.

Justamente, y es ese “entrar a mi apartamento” como bien lo comentó García hace poco en una nota periodistica, lo que sugiere que pudo haber sido cualquiera aquel que entró a su vida sin saber a qué iba especificamente.

No en vano el CHE final es el más agudo y agresivo, es el grito de un tipo que tuvo que callarse muchas cosas durante mucho tiempo. Es de alguna manera el grito de DESPIERTA para una sociedad que en muchas ocasiones no ha hecho otra cosa sino cuestionar y subvalorar a sus héroes. Es muy fácil perdonar, y perdonarse a sí mismo. Lo interpretamos como el mensaje central de la canción. Una autoreferencia a “Estaba en llamas cuando me acosté”: Si no nos podemos juzgar a nosotros mismos, como podriamos juzgar a los demás? El resto…ya lo sabemos.

> LA MUSICA:

El primer acorde es un bajo de Pedro Aznar que el oyente siente a la derecha de su auricular. A la derecha suena la instrumentación inicial liderada por una batería básica y clásica de rock, más unas guitarras acústicas. García incorpora varias voces de distintas tomas a la izquierda y centro más unas percusiones que semejan los loops de “Rap de las Hormigas” o de “Transformación”, en esa versión del fallido Kill Gil.

Noten como en la medida en que avanza el tema pareciera que la voz mejorara, como si hubiese sido a proposito dejar “lo mejor del tema para el final”. Una especie de simbolismo para lo que han sido estos tiempos de terapia y cambio. Porque curiosamente es hasta el final del tema donde Charly sube “hasta el cielo”, logrando un registro de voz sin precedentes en sus grabaciones de los últimos 12 años (quizá desde Say No More no se le oía una nota tan aguda en su voz).

En la primera parte casi no hay teclados, si es que no los hay. Los teclados entran después del silencio de 2 compases exactos. No, no es un error del tema. El silencio después del enfático “Ahí no más” tampoco es a proposito.

El silencio representa muchas cosas. El silencio de tanto tiempo sin saber de él, lo vació de aquellos que van “hasta ahí no más”, y también el espacio vacio que queda sin todas las cosas que él vio yendo más allá.

El espacio en blanco es lo más interesante de este disco, siendo un elemento poco común y casi imprecedente en la música de rock en Argentina. Pocos temas, entre ellos Crisalida de Pescado Rabioso, utilizaron un silencio tan prolongado en una canción, y sobretodo es un riesgo creativo considerando que el tema iba a ser un tema comercial. Después de todo…era el retorno del más grande, como bien lo proponía la exitosa campaña de difusión de parte de los allegados a Charly.

El silencio es la tensión, es la incertidumbre, es Charly haciendonos enfrentar a nosotros mismos y a nuestras ansiedades. La primera vez que se lanzó en simultanea mundial por las radios, la respuesta general era “Se cayó la señal”, “La radio no anda”, “Algo pasó con el sonido”. Pero no. Son dos compases, cinco segundos casi que se sienten como una eternidad. Estamos muy acostumbrados a lo rapido, a lo fugaz, a lo instantaneo. Al Twitter, al Facebook, al Youtube, a lo instantaneo. Charly nos hace esperar. Y nada extraño que en un futuro ese silencio se edite en algunas radios, como es práctica común de estas empresas. Hasta el momento no ha sucedido, y ojalá que siga así.

“Ahí no más”…

Y vuelve con el “Ché!”. Ahora con más coros, con un teclado que parece ser un Rhodes y una guitarra eléctrica. La grabación no suena sobrecargada y por el contrario está muy bien producida y balanceada. No es el mejor tema de García, no es García en todo su potencial, pero eso ya no importa. Después de todo lo que nos ha dado? Hay que celebrar que lo tenemos con un gran tema, que ya otras agrupaciones quisieran haber compuesto. Hay que reconocer que es una canción muy bien lograda. Han vuelto los teclados después del silencio…cosa curiosa, y ya la voz de Charly adquiere protagonismo absoluto en esa segunda parte de la canción.

Y el final magistral. Bombos al mango. Muy a la “Ringo Starr” El climax del tema se logra con el estribillo: “Andando, preguntando, discurriendo, caminando y esquivando tu manera de ser” con un juego de voces que hacen paneo entre lado izquierdo y derecho del auricular (porque sí, la música de García hay que oirla con auriculares). El puntillazo final va con el altisimo CHE! SI ES QUE ENTRASTE A MI APARTAMENTO en donde casi todos los instrumentos hacen un silencio de medio compas para que la voz de Charly sobresalga sobre el resto de la melodía.

“Es muy fácil sentirse bien, igual.” Y el organo sentencia el final de lo que en realidad es el principio de muchas cosas por venir. Larga vida al que nunca fue hasta ahí nomás…

Fuente: Charly García - Demoliendo Hoteles

Por Julio Salazar