Por Nelson Fernández
Corresponsal en Uruguay
PUNTA DEL ESTE. "¡Hola chetos!", exclamó Charly García al saludar irónicamente al público de la península oriental. Charly volvió con lo mejor, rock del bueno y un manejo del escenario que gozó de la diversión y la sorpresa, pero permitió disfrutar de la calidad de su música.
El recital fue en el parking del Hotel y Casino Conrad de la parada 3 de la Playa Mansa. Más gordo, con un saco que dejaba ver una panza inimaginable tiempo atrás para este músico, Charly mantuvo la simpatía de siempre, pateó micrófonos y generó un clima muy favorable a su actuación.
Miles de rioplatenses festejaron el retorno de Charly García al Uruguay en un recital que comenzó en la noche del viernes y se extendió hasta la madrugada del sábado, con un aplauso interminable. Tanto, que pese a los bis que aceptó cantar el músico argentino, cientos de espectadores se quedaran esperando por un posible replan, luego que se anunciara que el show había concluido.
"Hola chetos; yo no discrimino", dijo Charly luego de la segunda canción que tocó para una platea que no se cansó de apaudirlo.
Charly presentó su nuevo disco "Kill Gill", pero también tocó grandes éxitos.
"Yo soy un artista; tengo códigos, tengo una trayectoria, tengo q trabajar para ustedes", fue lo que repitió en numerosas ocasiones. "¿Vos sos un artista? Yo sí soy un artista", le decía a uno de sus guitarristas. Todo eso era muy festejado por un público que en su gran mayoría demostraba que eran fan de García.
Sus ironías estuvieron presentes en todo el recital. "Esta la compuse en una playa pero no de acá, era más berreta", dijo Charly antes de cantar "Filosofía barata y zapatos de goma". Y fue ovacionado cuando pidió el coro a la platea con ". ni ésta mentira te hace feliz, quise quedarme cuando morí de pena, quise quedarme pero me fui; Y en la terminal, y en la Terminal, estoy descalzo y te espero a ti",
Un show aparte fue el "lanzamiento de micrófono" con el que jugó toda la noche. Usaba un micrófono en el piano y otro de pie que sacaba de su soporte para caminar en el estrado, y cada pocos minutos lanzaba hacia un asistente, que lo devolvía a su pie en cuanto podía. Pero no siempre el asistente podía acertar el momento en que Charly lo lanzaba y hacia dónde se dirigía el micrófono. El público festejaba mucho cuando su asistente lograba atajar el micrófono.
"¿La estan pasando bien?", preguntó Charly ante un público que le celebraba cada ocurrencia y le aplaudía con fervor cada tema.
"Yendo de la cama al living" fue uno de los temas más aplaudidos, aunque es complejo decir cuál fue el tema más festejado, porque la platea y tribunas ovacionó cada tema y cada pasaje de Charly en el escenario.
Charly había llegado justo ayer viernes a Punta del Este y luego se refugió en el exclusivo Hotel Boutique Casa Suaya, un complejo que está en la Ruta 10 por el kilómetro 185,5, en el camino de José Ignacio a la Laguna Garzón.
Sus requerimientos para el tiempo de toque no fueron muy exigentes. El camarín era muy rústico y sencillo, y no había más que algunos snacks y muchas botellas de una bebida que consumen atletas.
Fuente: La Nación