Dale, dale... Traigan de una vez por todas la escalera, asì me tiro', ordena Charly Garcia (54), mientras se acomoda su diminuto short de lycra y se prepara para saltar dentro del tanque austaliano que oficia de piscina en el parador Robinson Crusoe de Pinamar. Luego sale de la reposera y anuncia: '¡Se viene el pique francès!'. Y entoces se coloca una tùnica hindù 'para tener mayor glamour', toma carrera rumbo a la pileta, corre, salta, gira en el aire, y se zambulle. Da un par de brazadas y se escurre como si fuera flipper. Cuando se incorpora, dice chorreando agua: 'Aunque pocos lo saben, yo en mi infancia aprendì a tirarme en el tanque australiano del campo de mi tìo en Paso del Rey'. Pero eso no fue todo...
Antes, mientras almorzaba en una de las cabañas del balneario, divirtió con sus anécdotas a un grupo selecto de amigos, entre los que se encontraban Javier Pedelaborde, Cristiàn Coelho y Juan Ramòn Balcarce. Contò que se habìa tirado de su habitaciòn del tercer piso a la pileta del hotel Algeciras, y que tambièn arrojò al agua una grabadora porque las cosas no estaban saliendo como èl querìa. 'Pero la màxima me paso cuando le di una patada a la puerta del cuarto de mi manager, se vino abajo y del otro lado habìa dos chicas con cara de susto. ¡ Nadie me avisò que lo habìan mudado de habitaciòn! Si no tengo información, la culpa no es mìa, je...', comentò antes de volver a lanzarse al agua, esta vez desde la solicitada escalera, que tiene unos cinco metros de altura. Despuès de un splash bastante sonoro, García comenta: 'La pucha, me peguè el c... contra el piso'. Y sale, y se embadurna la cara con crema protectora, y no para.
-Charly, me comentaron que está haciendo algo que usted llama 'un disco para ver'. ¿Me puede explicar qué es eso?
- Te dijeron bien. Va a ser un disco que se va a ver. Ya hice un tema, compuse Telepática, que me llevó mucho tiempo. Lo estoy haciendo en lo de Palito (Ortega), en su casa de Luján, que es alucinante y tiene zoológico y todo. Yo estaba peleado con Palito, pero, como dicen, 'el tiempo hace reflexionar a las personas'. Y entonces me amigué, je. Este disco-film que estoy haciendo va a ser algo que comercialmente no tiene antecedentes, y entonces va a tardar en encontrar su lugar en la industria. Lo hago para que tiemble Steven Spielberg. De todas maneras, cada inconveniente que me aparece lo tomo como si fuera una isla màs de las que visitó Ulises cuando volvìa para ver a Penèlope. ¿Recordás?
-¿Y el proyecto marcha más o menos bien?
-Yo digo que de a ratos. Porque el disco que grabé en lo de Palito lo rompí. Es que me siento muy insatisfecho con lo digital. Y con no poder ni tocar ni moldear la obra que estoy haciendo. Y pasó que cuando se fue Marcos, el ingeniero de Say No More, dejó la máquina con un código para que no se pueda entrar. Y yo no podía ingresar a mi propio disco. Entonces me rayé y fue todo a parar a la m...
-¿Y empezó de nuevo?
-Exacto. Pero está bueno. Porque me mantengo entretenido. Si hago lo que quiero, está todo bien. Yo digo que mi vida como músico es como una historieta, un Inodoro Pereyra, que no termina nunca. De repente me doy cuenta de que a veces me vienen golpes creativos fortìsimos que no los puedo evitar. Ahora estoy en uno de èsos. Mirà; ayer hice una canciòn y eso es lo mejor que me puede pasar. Es buenìsimo, porque a veces te sentìs preso de un engranaje formado por tipos que no valoran la mùsica. Pero cuidado, porque es la mùsica lo que a ellos les genera dinero.
Charly interrumpe la charla un minuto para secarse, toma un trago de clericò y avanza con algunas historias vividas con las que èl considera las mujeres màs lindas y queridas de la Argentina: 'La Alfano es mi fan nùmero 1. Yo la maltrato, porque a ella le gusta, y està todo bien. Un dìa se me apareciò en casa con un ramo de rosas. Ahora està de novia con Matìas Alè. Me parece que a èl tambièn le gusto, je...' Y luego es el turno de Araceli Gonzalez y Cathrine Fulop; 'En la fiesta de GENTE de los 40 años, Araceli se me sentò arriba de la rodilla - señala la derecha -. Me apoyò el huesito justo ahì. Me querìa morir. La que tambièn estaba bàrbara ese dìa era la Fulop. Yo la miraba y me parece que a Ova Sabatini no le gustaba nada, je. La anècdota esa de lo que me pasò en el ùltimo programa en el que visitè a Susana Gimènez, no la vas a poder contar, porque ahì sì que vamos todos presos, vos incluido', bromea, y luego se pone serio esperando la proxima pregunta, mientas la sombrilla se le viene encima, culpa del viento.
-¿Por què en los ùltimos tiempos tuvo algunos cortocircuitos con el pùblico? Pasò en Pinamar y en el Gesell Rock.
-Mirà, yo siento que tengo la suerte de tener un pùblico que entiende mis còdigos, sabe de dònde vengo y acompaña màs o menos para dònde voy. Y a pesar de que a veces recibo rechazos masivos, hay un grupito que entiende que algo va a pasar con eso y sigue el camino. Bob Dylan decìa que de cuando en cuando hay que buscar el 'buuu' del pùblico para que despuès digan que sos un clàsico. A veces hay que provocar el derecho de la gente a decir que no. No me siento un tipo que toca para 50 personas que comen langosta. Quiero que me digan; 'Ya nos aburriste'. Como yo tambien lo hago, tienen ese derecho. Lo que pasa es que ellos son muchos màs y hacen mucho ruido cuando se enojan.
-Hablando de enojos, ¿està enfrentado con Migue, su hijo? Porque se publicò que usted llamò a las radios para que no pasen sus temas, y tambièn impidiò que se presentara en el Gesell Rock.
-Ay, ay, ay, ay, ay. ¿A vos te parece que yo puedo hacer una cosa asì? Mirà, te doy un ejemplo de còmo mienten; me tirè a la pileta del hotel Algeciras desde mi habitacion del tercer piso y ya estan diciendo que lo hice desde el rascacielos que todavìa no se construyò en Pinamar. Con Migue està todo bien. Simplemente somos padre e hijo, y yo no hago demostraciones de mi vida privada en pùblico. Vivimos juntos y estamos pasando por un perìodo donde hay que definir ciertas cosas, pero no tiene nada que ver con que èl no sea un divino o que a mi no me guste lo que hace. Hay un mito tambièn que dice que ser hijo de Charly Garcia es una desgracia. Entonces dicen 'Pobrecito, es hijo de Charly' . A mì me parece que ser mi hijo es buenìsimo y que el nene ya tiene 27 años y no necesita un padre que lo prohiba ni que lo haga famoso. El tiene su propia vida. Simplemente tenemos algunas diferencias a nivel vecinos, porque para que el padre haga de padre, el hijo tiene que hacer de hijo. Por ahì pasa la cosa.
-¿Hay rivalidad entre ustedes?
-No, para nada. Digamos que yo soy mas heavy. El es màs conservador y tenemos roces normales.
-¿no se quieren?
-Màs bien que nos queremos, lo amo. Pero me causa gracia que me digas esto de las radios y del Gesell Rock. El punto de conflicto es que para su disco èl fue contratado por mi misma grabadora (N de la R: EMI), y ellos no me avisaron nada. Me parece que eso no fue elegante. Siempre me viene a la mente el recuerdo de mi hermano Enrique, que se metiò en el rock y le fue muy mal. Por eso tengo una visiòn frìa y terrenal de las cosas, y no quiero que lo usen a mi hijo. Nada màs. Ahora, si me dejàs, quiero aclarar lo del episodio con el fotògrafo en el Uruguay.
-¿Se arrepiente de ese escàndalo?
-Me da pena que haya ocurrido algo asì. Pero estàn diciendo que me escapè, y yo les digo que tenìa el pasaje para irme ese dìa. Me doliò no haber podido disfrutar de la estadìa en lo de Alan (Faena). Todo por un tipo que por ahì se arreglò con otro para hacer un negociòn o tener la exclusiva del escàndalo. Pero yo soy un profesional del escàndalo, asì que agàrrense, porque Charly ataca de nuevo...
Fuente: Revista Gente